Todos los llamados de mi nombre, para la gloria mÃÂa los he creado, los forme y los hice. IsaÃÂas Capitulo 43:7
Al escudriñar todo el capÃÂtulo de IsaÃÂas 43 ( leer todo) nos sorprende en diferentes aspectos: 1) nos habla del poder de la Redención; nos confronta con un ANTES y un DESPUÉS. Una vieja humanidad con una RELIGIÓN, y una nueva humanidad con una RELACIÓN.
Si Elohim (Dios) tiene como casa espiritual a cada creyente, porque muchos no manifiestan el poder de la redención que debe manifestarse de ir de triunfo en triunfo y de poder en poder como dice su bendita palabra. La SHEKINA ( brillo, resplandor, la gloria de Dios) debe romper con todas las limitaciones que el enemigo quiera colocar.
No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigas a memoria las cosas antiguas IsaÃÂas Cap.43:18. El poder de la redención debe traer sanidad y liberación rompiendo con las ANCLAS DEL PASADO. Asàcomo el Apóstol Pablo paso de lo ordinario a lo extraordinario, hubo un rompimiento en su vida, se quebró esa vieja humanidad, fue despojado de su orgullo, se negó asimismo, permitió que el Adonai (Señor) se manifestara a través de él con señales y prodigios. ( Hechos Cap.28:1 al 10 ).
Somos portadores de la SHEKINA su palabra lo dice ¿no sabéis que sois templo de Dios, y que el EspÃÂritu de Dios mora en vosotros? El MesÃÂas oro por sus discÃÂpulos y le decÃÂa al Padre: LA GLORIA QUE ME DISTE; YO LES HE DADO, PARA QUE SEAN UNO, ASàCOMO NOSOTROS SOMOS UNO. Juan Cap.17:22 .
Debemos renunciar al tirano gobierno de nuestro egoÃÂsmo. Echando a un lado nuestra búsqueda de ventaja, seguridad y placer, pero para esto debo identificarme con la muerte y la resurrección de MesÃÂas, tú y yo morimos y también resucitamos. En el bautismo hacemos un acto simbólico como creyentes y esto debe cumplirse en nuestras vidas.
El pecado es efÃÂmero, pero si me considero muerto, no voy a reaccionar a deleites, a fuerzas espirituales que lanzan redes para destruir vidas y familias. El Adonai quiere que vivamos como verdaderos hijos de Dios, bendecidos a todo nivel, y para eso es necesario que el enemigo no tenga derechos legales por tu manera de vivir. Debo crucificar mi carne, sepultar mi vieja humanidad para vestirme del nuevo hombre.
De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto. El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará. Juan Cap.12: vers.24 y 25.
El MesÃÂas se identificó con la naturaleza pecaminosa, Él fue hecho pecado; aunque no peco, asumió nuestro lugar para redimirnos, porque estábamos condenados, Él se ofrendo en sacrificio vivo  Hebreos Cap.10:vers.12.
En nuestro diario caminar tendremos muchas pruebas que se convierten en un fertilizante a nuestro carácter; pero Él Adonai nos dice: Ahora asàdice el Jehová, Creador tuyo, oh Jacob y Formador tuyo, oh Israel, no temas porque yo te redimÃÂ, te puse nombre, mÃÂo eres tú cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los rÃÂos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. IsaÃÂas Cap.43: vers. 1 y 2.
Tenemos un llamado, una misión que cumplir. Él nos dice: sacad al pueblo ciego que tiene ojos, y a los sordos que tienen oÃÂdos. IsaÃÂas Cap.43:8.
Tanto activismo dentro de las congregaciones ha generado un estancamiento espiritual, aún en pastores y lÃÂderes, es tanta la carga de ocupación que no hay tiempo para ser direccionados por el EspÃÂritu Santo, en preguntarle cual es su voluntad; porque se establece primero el gobierno humano, con una rutina humana.
Tantos creyentes que no han podido entrar en tener una verdadera RELACIÓN, están todavÃÂa atados a la religiosidad porque no han tenido una purga para sacar los parásitos que son opositores al propósito divino de RESTAURACIÓN Y RESTITUCIÓN.
Nosotros como IGLESIA DE JESUCRISTO necesitamos un cambio, un soldado herido no puede ir a la guerra para defender su casa, sus seres queridos y brindar ayuda a su prójimo.
Es tiempo que de las vidas creyentes salga el olor de conocimiento y olor de manifestación de la presencia de Elohim (Dios) y  que el mundo que nos rodea perciba a través de nuestras acciones el olor de CRISTO EL MESÃÂAS en nosotros. ( leer 2ª. Corintios Cap.2: vers. 14 al 17 ).
CONCLUSIÓN: La manifestación gloriosa del Padre en los cielos y en la tierra depende de nosotros sus hijos, somos casa del Altisimo estoy diseñado para cumplir el propósito y sueño que Él ha colocado en mi corazón.