Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no lo hará? Hablo, ¿y no lo ejecutará? He aquàhe recibido orden de bendecir, el dio bendición y no podre revocarla. Números Cap.23: 19 y 20.
Mi mente debe adoptar una lÃÂnea de pensamiento en el cual debo creer que Él nos está preparando y equipando para alguna obra extraordinaria en el futuro. Pero al crecer en su gracia descubrimos que Dios esta glorificándose en nosotros a sàmismo aquÃÂ, ahora, en este mismo instante.
Dios es el maestro y diseñador y Él permite las adversidades en nuestras vidas para comprobar si puedes superarlas de manera apropiada. Salmo18:29…con mi Dios asaltaré muros. Fortaleceos en Él Señor y en el poder de su fuerza, Efesios Cap.6:10. Necesitamos la vitalidad espiritual que obtenemos a través de la oración, para hacer frente a todo aquello que Él permite en nuestro camino. Él Señor cumplirá su propósito en su vida y en mi vida a pesar de la adversidad.
Habacuc era un hombre que querÃÂa respuesta. Perturbado por lo que observaba, formulaba preguntas difÃÂciles. Estas preguntas no eran simples ejercicios intelectuales ni quejas amargas. Habacuc veÃÂa un mundo que morÃÂa y le partÃÂa el corazón. ¿Por qué existe el mal en el mundo? ¿Por qué los malos están ganando?, sin miedo ni vacilaciones presentó sus quejas directamente a Dios.
Le dice que escriba la VISION, aunque tarde, ESPERALO. Cuando la visión es de Dios a través de la inspiración que viene con ella, nuestras vidas adquieren una dimensión extraordinaria porque esta energizada por el mismo Dios; AUNQUE TARDE, debes tener el poder de resistir y para eso necesitas PACIENCIA que NO ES aguante ni resignación, Es firmeza, persistencia que nos lleva a un entrenamiento de formación de carácter sólido. Dentro de nuestras vidas nace una esperanza que es FUTURO, es un proyector; si Dios lo dijo VENDRA. Escribe tus metas y propósitos a nivel espiritual, fÃÂsico y material, preséntaselos al dueño de todo porque él quiere dar lo mejor a sus hijos.
Dios envÃÂa sus fuerzas allÃÂ, donde nosotros hemos fracasado, la mano de Dios se retrotrae al pasado, liquidando y dando satisfacción a todas las demandas y cuentas pendientes contra nuestra conciencia.
Al salir al encuentro del AÑO NUEVO, nuestro pasado nos confronta con cosas rotas y hechos irreversibles. Es cierto que hemos perdido oportunidades que jamás volverán, pero que Dios puede traer REFLEXIBILIDAD CONSTRUCTIVA cara al futuro. Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios RESTAURA lo que pasó. Eclesiastés Cap.3:15.
Recibe de parte del Señor las promesas y profetÃÂzalas sobre tu vida y seres queridos; porque nuestras palabras tienen poder hacer visible la BENDICION.
LARGURA DE DIAS ESTA EN SU MANO DERECHA. EN SU IZQUIERDA, RIQUEZAS Y HONRA. Proverbios Cap.3:16.
Este artÃÂculo está ligado en oración en devocionales.